Bueno, lo primero que debo decir, es dar las gracias a todos los que me ayudasteis en el anterior post, y a los que les haya interesado, la verdad es que me ayudasteis mucho. Bien, en ésta ocasión, quiero hablar de dos aspectos muy importantes en el juego que ando desarrollando.
Por una parte, se trata de lo que he denominado "Vida Pasada", éste aspecto, hace referencia a cual era el oficio de nuestro superviviente antes de la pandemia Zombi. Así, podremos elegir entre una amplia gama de profesiones, muy estereotipadas obviamente, que nos darán beneficios así como nos limitarán a la hora de crear el personaje. En éste sentido, podremos encontrar algunas como: Policía, oficinista, profesor, bombero, Médico, Empleado de Hogar, Dependiente, etc. Algunas limitan la puntuación máxima que podemos elegir en las características básicas, o nos ofrecen bonificadores a dichas puntuaciones, o ganamos puntos adicionales en una habilidad, o bonificadores en algunas pruebas de habilidad.
Vemos así como la "Vida Pasada", nos permite limitar la creación de personajes "Munchkin" o "Power Game" , ya que cada profesión te limita determinados aspectos, y te obliga a cumplir una serie de requisitos. Ahora bien, podremos pensar "Bueno, pero seguro que luego a la hora de crear a los supervivientes, todos los jugadores querrán ser policías o bomberos, que tienen bonificadores mejores para el combate". Bueno, eso ya es cuestión de dos factores:
1- El papel del GM (Game Master, que me encanta ese término), quien al crear la aventura podría limitar las profesiones a elegir. Así, incluso si una campaña comienza en una comisaría de policía, podríamos encontrar las siguientes profesiones disponibles: Policía, Delincuente (que engloba muchas cosas), Encargado de Limpieza, Secretaria/oficinista, incluso conserje.
2-Los propios jugadores. De ellos depende el buen desarrollo de cualquier juego de rol. Así, si el Master tiene un grupo de juego que sabe va a querer personajes armados hasta los dientes, buenos tan sólo en el combate, y que se alejen de un juego más narrativo, quizás sea mejor que elijan otro juego, pues en "Pandemia", la idea es desarrollar una campaña en la que los personajes se enfrenten al peligro de la supervivencia.
Una vez hemos visto la importancia de "la Vida Pasada", vamos a tratar un punto indispensable del motor de juego de "Pandemia", las habilidades. Estas, están agrupadas entorno a las características básicas, así, podremos encontrar:
Fuerza: Derribar puertas, combate cuerpo a cuerpo, presa, empujar/ Cargar objetos, saltar...
Destreza: Esquivar, combate con armas a distancia, mantener el equilibrio, moverse en silencio...
Constitución: Nadar, carrera, aguante, resistencia a la enfermedad...
Inteligencia: Falsificar, usar equipos electrónicos, usar herramientas, saber, conocimientos médicos...
Percepción: Detectar trampas, escuchar ruidos, sentidos alerta, seguir rastros...
Carisma: Intimidación, convicción, engañar, regatear...
Asé, como decía en el post anterior, cuando se necesite realizar una prueba de alguna habilidad, se debe lanzar el dado que tengamos en la característica a la que se vincula, y sumamos nuestra puntuación de habilidad (finalmente gracias a vuestros consejos, no se sumará la puntuación de la característica básica, y la dificultad estándar será 6 , por lo que como veréis no es fácil realizar cualquier cosa)
En el momento de la creación del personaje, cada jugador dispone de un total de 15+Int puntos, para distribuir entre las habilidades. Aquí, influyen varios aspectos. Por un lado la "Vida pasada elegida", y por otro lado las puntuaciones de Características Básicas determinadas. Esto se debe, a que el jugador tendrá algunas limitaciones al elegir las habilidades según que Vida Pasada haya elegido para él. Por otro lado, un superviviente, sólo podrá otorgar a un grupo de habilidades, un total de puntos, igual a su valor de la característica que rige al grupo.
En fin, quizás parece un poco lioso ahora, pero es porque voy saltando algunas cosas. Espero vuestra opinión, y sugerencias de Vidas pasadas (sólo el nombre basta) o de habilidades. Un fuerte abrazo.